A unos 70 km. de Palermo se encuentra uno de los pueblos que más me gustan de toda Italia. Es la segunda vez que lo visito y aunque he notado un incremento del turismo, a pesar de eso, sigue conservando la esencia que me enamoró la primera vez.
Si vais a desplazaros hasta la maravillosa Sicilia, no os perdáis este rincón tan sublime donde se mezcla lo tradicional con lo nostálgico, pero en el momento presente.
Aunque yo ya conocía este pueblo estaba igualmente emocionada porque se lo iba a presentar a mis compañeras de viaje.
Desde Palermo, un tren (5,60 euros) con vistas al mar casi todo el trayecto, os deja en menos de una hora en Cefalú.
No me extraña que algunas escenas de la fantástica película Cinema Paradiso se rodaran aquí...
Desde que pisas su suelo, respiras ese aire de ensoñación que se apodera de ti y no puedes explicar con muchas palabras, pero no importa, tú párate y contempla.
Sus callejuelas, estrechas y serpenteantes, me evocan a la infancia y a cómo vivía yo el verano... La familia, el hogar, el esperar la llegada de los primos y tramar cualquier aventurilla propia de la niñez...
Esos tiempos que ya no vuelven, aunque los recreas en la memoria, y sin saber por qué esbozas una sonrisa..
Esas sensaciones que por suerte se han quedado ancladas en este pueblo y en cada uno de sus rincones...
No hay nada como madrugar un poquito, aunque en vacaciones cueste, y te dirijas al antiguo puerto de pescadores a zambullirte en las aguas cristalinas, y aún alertargadas, de su playa.
Con apenas nadie que perturbe el momento que vives, antes de que lleguen todos y ese lugar se transforme en otro diferente...No tiene precio...
Y seguir contemplando y observando...
Si subes la muralla por encima de las barcas de los pescadores llegas a lo que parece el final o el principio de una historia, con sus candados oxidados y la inmensidad del mar...
Y de nuevo los recuerdos se apoderan de mí cuando a lo lejos escuchas un alboroto y son los niños y los adultos haciendo juegos en el agua, sin un móvil a la vista, jugando, como entonces...
El pueblo ya está despierto y vibrando de vida, incluso mis compañeras se incorporan a jugar y a saltar al mar...
Y de nuevo Cefalú nos regala bonitos momentos, y más risas y más vida...
Si te gusta la buena comida, sólo decir que ,en mi opinión, Sicilia posee la mejor gastronomía de todo el país.
No dejéis de probar la Caponata Siciliana y las Sardes... Me relamo sólo de recordarlo..
Si os apetece un poco de cultura visitad los Lavaderos y la Catedral
O subid a la Rocca para divisar las mejores vistas del pueblo..
O podéis ir de tiendas para llevaros algún recuerdo de este maravilloso lugar...
Y siempre que podáis volved al puerto, por la mañana o por la noche... En cualquier momento os deslumbrará...
Gracias a mis amigas por darme la oportunidad de enseñarles uno de los lugares del mundo que más me gustan... Un brindis por vosotras...
Si te ha gustado ayúdame a compartir...¡¡¡¡¡¡ Buen verano a todos!!!